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La Biblioteca "Magdalena Leroux" del IES "Pérez Comendador" es un espacio educativo abierto, centro de recursos, información, documentación y educación permanente que debe apoyar los diversos procesos de aprendizaje y enseñanza, fomentar la lectura, la cultura y trabajar por la disminución de las desigualdades de partida o adquiridas por el alumnado, sirviendo también de apoyo para aquellos que tengan necesidades educativas especiales.
(Proyecto de la Biblioteca "Magdalena Leroux")

lunes, 28 de marzo de 2011

Manuel Vicent: Balada de Caín

Según tengo entendido mis padres se aparea­ron muy lejos ya del edén. Fui engendrado a pleno sol en medio del desierto y luego nací una noche de luna llena bajo un sicomoro. Mi llega­da a este mundo fue coreada por los gritos y aplausos de una mona babuina mientras mi madre, a tientas en la oscuridad, se partía el cordón con los dientes. Ella tuvo que esperar a que amaneciera para verme el rostro y con la primera luz del día descubrió que yo traía una marca sagrada en la frente, un cero grabado en­tre las cejas. No supo interpretar esa señal, pero sin dudar nada me impuso el nombre de Caín, que en la lengua del desierto significa vida. D también: estoy vivo y soy forjador.

Los pechos de mi madre, que unas veces sa­bían a carne de lagarto y otras a leche de pitera, me amamantaron a lo largo de sucesivas som­bras del camino. Los recuerdo en el subcons­ciente desbridados y cubiertos de polvo, cruza­dos por unas venas hondas como, ríos azules que venían a dar en mi hocico crispado. Aque­llos manantiales me llenan de humedad toda­vía la memoria. Cuando se agotaron, mi madre me destetó untándose los pezones con una pas­ta de ceniza y a partir de ese momento comencé a alimentarme de raíces, de los frutos que de­paraba el azar, de reptiles benignos, de cual­quier producto de la caza o de la imaginación y, sobre todo, de mi propia hambre. Desde muy niño me nutrió la espiritualidad de la sequía. Mis padres, que ya llevaban mucho tiempo ex­traviados en el laberinto de arena con el cráneo

(Manuel Vicent: Balada de Caín, Barcelona, ed. Destino, col. Áncora y Delfín, nº 603, 7ª ed., 1987, pág. 7)

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